"Es normal vivirlo ante una perdida y necesitar apoyo"
El duelo es la adaptación emocional que conlleva cualquier pérdida (de un empleo, un ser querido, una relación, etc). Es normal sentirlo y puede preceder a cualquier persona.
Es un proceso psicológico al que enfrentamos tras alguna pérdida, algo que todos, tarde o temprano viviremos en e la vida.
Para algunas personas, el proceso de duelo puede durar más tiempo que para otros, lo que ocurre a menudo es que esa persona o situación tenía mucha relevancia en la vida de la persona, es un proceso que cada persona debe llevar a su ritmo, garantizando siempre su bienestar.
Algunos síntomas que pueden presentarse durante un proceso complicado de duelo son:
Incredulidad para aceptar la ausencia de una persona o cambio de una situación.
Un pesar intenso y dolor emocional, que a veces incluye incertidumbre o enojo.
Sentimiento recurrente de culpa, angustia, nostalgía o tristeza.
Sensación de soledad, ausencia y desconexión de la realidad.
Pensamientos negativos o preocupantes acerca de la situación.
Cansancio, falta de apetito, sudoración, dolores de cabeza, entre otros.
El duelo también se exterioriza en llantos, rabia, ataques, diferentes emociones y reacciones, todas ellas consideradas "normales" en esos momentos. Hay que tener en cuenta que para una superación del duelo no es aconsejable bloquear esas sensaciones, pues no se pueden enfrentar si no se sienten. Lo contrario es la negación de la pérdida, lo que llevaría a comportamientos desadaptativos.
Es importante conocer el concepto, si después de haber experimentado una perdida identificas emociones diferentes, no dudes en solicitar ayuda, un especialista puede apoyarte en tu proceso. La manifestación externa del duelo es el luto, que es su expresión cultural.
“Sanar no es lineal y todos estamos tratando de hacerlo como podemos, a nuestro ritmo y con los recursos que tenemos".
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